Los moriscos de Derna
En el año 1609, durante el reinado de Felipe III, se tomó la decisión de expulsar a todos los moriscos que vivían en España. En un lapso de 4 años, casi 300,000 personas abandonaron definitivamente el país para instalarse en varias regiones de la cuenca del Mediterráneo.
Si bien los actuales países del Magreb, como Marruecos, Argelia y Túnez, recibieron la mayor parte de las olas migratorias de moriscos, también se establecieron en otras regiones menos conocidas. En la ciudad libia de Derna, entonces territorio recién integrado al Imperio Otomano, se asentaron unas 24 familias, constituyendo uno de los ejemplos más exitosos de establecimiento morisco en el país.
Para resaltar la destacada influencia morisca en Libia, el Instituto Cervantes de Túnez, en colaboración con la Embajada de España en Trípoli, organizan la conferencia "Los Moriscos de Derna".