Nunca estuve realmente aquí
Sam (17, germano-ghanés) y su madre Rita esperan ansiosos la llegada de su viejo amigo Gifty y su hijo Kwesi (19, ghanés). Cuando Kwesi entra en la vida de Sam, Sam comienza a enamorarse de Kwesi y cuestiona su propia identidad. Pero su creciente conexión se ve amenazada por la falta de "estado de residencia" de Kwesi y Gifty.