Toritos de Pucará
Pucara
El «Torito de Pucará» es un símbolo totémico conocido como conopas (quechua) o illas (aimara) usado en los rituales andinos. Es la representación de la trilogía andina y la unión de los tres elementos naturales: Una chomba de arcilla (phuño) representa a la Pachamama y la riqueza, el torito es una manifestación del hombre y la sabiduría, y la cruz o el crucifijo al mundo superior y el cosmos.
Cuenta la leyenda que, en Pucará, hubo una prolongada sequía, no había agua y los pozos se estaban secando rápidamente. Cierto día, a un campesino indígena se le ocurrió hacer una ofrenda como sacrificio al dios Pachakamaq, decidió subir al peñón de Pucará llevando consigo un toro y hacer sus peticiones de lluvia. El toro al oponer resistencia logró hincar con su cuerno una roca de la cual brotó agua, tanta agua que el pueblo pudo sobrevivir a la sequía.
Este peculiar toro tiene muchos detalles con un significado propio. Por ejemplo, el agujero de la espalda representa la fecundación. El asa representa la unión del hombre y la mujer en el matrimonio. Los ojos del toro simbolizan el actuar alerta del ser humano al mundo que lo rodea y la autoobservación. Además, los diferentes detalles hechos con pincel resaltan las formas de espirales que representan los giros de la vida, creencia que se basa en la conciencia de saber que todo lo que se da, regresa. El color blanco del toro simboliza pureza y protección (pareja), el color negro el ego, los defectos psicológicos, y la chicha (agua) y/o vino que está dentro como fuente de vida está relacionado con la transmutación al factor nacer y con la fecundación.
