Hay muchos libros que se centran en las controversias sobre el fin de Wallenstein, pero pocos los que tratan las circunstancias que rodearon el comienzo de su "Primer Generalato" en 1625. El año anterior, 1624, había sido un año de casi "tranquilidad en el frente occidental" (excepto por el asedio de Breda). La "guerra de los Treinta Años" parecía haber llegado a su fin después de sólo media docena de años de combates esporádicos.
La guerra volvió a cobrar vida gracias a una incómoda combinación de potencias con una agenda anti-Habsburgo, que culminó en el Tratado de La Haya (diciembre de 1625), pero pronto volvió a desmoronarse. Pero la mera amenaza de tal desafío, encabezada por Cristián IV de Dinamarca, proporcionó (¿o pareció proporcionar?) el estímulo para que el Emperador confiara a Wallenstein la tarea de formar un ejército que resultó ser más grande que cualquier otro que hubiera poseído Fernando II. hasta ahora... y mucho más grande de lo que jamás podría esperar pagar...
El objetivo de este simposio es analizar la dimensión "austriaca" (y bohemia) tanto internacional como interna de aquellos dos años cruciales de 1624-25, echando una nueva mirada a las fuentes. Estamos interesados tanto en los objetivos, acciones y mentalidades iniciales de las (que pronto serán) potencias en guerra como en sus percepciones del fenómeno Wallenstein que habían ayudado a provocar, y sus reacciones ante él.