Sin vergüenza

Un guion cinematográfico cae en manos de Isabel por casualidad. Al leerlo se da cuenta de que es la misma historia del romance que tuvo ella con el director de cine Mario Fabra,  autor del guion. Isabel decide citarse con Mario, al que no ha vuelto a ver; pero a la hora de la verdad ella se siente ridícula y finge no reconocerle. Él, que también la ha reconocido, reacciona de la misma manera. Ambos tienen amantes jóvenes: Mario a Cecilia, una actriz de teleserie con problemas de autoestima; Isabel a Alberto, un profesor de expresión corporal, primario y dependiente. Mario necesita actores nuevos para su película. Tras meditarlo, decide que sea Isabel y su escuela quienes los consigan. En realidad él desea estar cerca de Isabel tanto como Isabel desea reencontrarle.