Encara hi ha algú al bosc
Lejla Damon es una joven de 25 años, que creció en una família de clase media en Londres. Sus padres, periodistas, acompañaron la guerra de Bosnia. En diciembre de 1992, durante el rodaje en un hospital de Sarajevo que estaba siendo bombardeado, vieron a una mujer queriendo ahogar el bebé que acababa de dar a luz. El bebé era fruto de una violación y lo consideraba semilla del enemigo. Durante las guerras de los Balcanes, entre 25 mil y 50 mil mujeres fueron víctimas de violencia sexual. Lejla, Alen, Ajna son niños nacidos de la violación. 25 años después, se van a reunir en su lucha para romper el silencio y superar el estigma.
