Guerrero dirige a Piazzolla y Beethoven
Astor Piazzolla, nacido hace un siglo, revolucionó el tango argentino añadiéndole sofisticación urbana. Su concierto Aconcagua, llamado así por la conocida montaña andina, es a la vez meditativo y astuto en su espíritu. Giancarlo Guerrero dirige un programa iniciado por la Chacona de Buxtehude, orquestada vibrantemente por el compositor mexicano Carlos Chávez, y terminado con la ingeniosa y firme Primera Sinfonía de Beethoven.