La Singla

Antonia Singla, que revolucionó el mundo del flamenco a los 17 años, es una gitana nacida en las afueras de Barcelona. Empezó a bailar delante de un espejo, golpeando el pie con fuerza, casi furiosamente, para sentir las vibraciones, porque no oía nada. Poco después de nacer, la niña se quedó sorda y aprendió a bailar sin oír la música. Hay algo trágico en su mirada, una pasión que va mucho más allá de la danza. Se fijaron en ella y el mundo artístico intentó ayudarla, pero a los 30 años desapareció de los escenarios sin dejar rastro. 

Cincuenta años después, una joven encuentra unas viejas imágenes de archivo de Antonia que la fascinan. Comienza una investigación que le revela que La Singla tuvo un gran éxito en Alemania, donde se le consideraba la mejor bailaora de flamenco del mundo. ¿Qué pudo ocurrirle y cómo desapareció del radar mundial?