El perro que no calla
Cada vez que Sebastián se ausenta de su casa, el aullido de su perro lleva a sus vecinos al desespero. Sebastián termina por llevarlo a su trabajo, pero esto va en contra de la voluntad de su jefe. Así pasa la vida de trabajo a trabajo, de un lugar a otro, de soltero a casado, mientras observamos cómo va cambiando no solo su mundo interior, sino también el mundo que lo rodea. Aunque nunca se queja, se le ve bastante sombrío. Y para ello el protagonista Daniel Katz no necesita palabras: un abrazo torpe, un momento de ausencia durante una conversación. Su actitud resignada algunas veces parece hasta cómica, aunque sus problemas también suscitan cierta compasión. El perro que no calla es una película melancólica, mística y muy graciosa sobre un hombre gentil que toma decisiones banales con consecuencias determinantes. Esta película de aprendizaje para adultos muestra cuán épica y absurda puede ser una vida humana. La proyección de la película se realizará el 23 de abril en el Centro Cultural Buda de Cortrique a las 18:00 y en la sala Sphinx de Gante a las 17:30.