Camagroga
La Huerta de Valencia es un lugar privilegiado de la agricultura mediterránea. Su desarrollo como sistema agrícola a gran escala comenzó en la era de Al-Andalus (siglos XI y XII), cuando las poblaciones dispersas en el área comenzaron a organizarse y a explotar los recursos hídricos del río Turia a través de una compleja red de acequias. Este paisaje cultural con siglos de historia ha sobrevivido hasta nuestros días, pero en las últimas décadas ha sufrido un proceso de deterioro en el que grandes extensiones de las históricas llanuras fértiles de Valencia han desaparecido; un proceso que no deja de avanzar. La Huerta está muriendo”, claman los agricultores. Uno de los últimos es Antonio Ramón, Camagroga. El nació aquí, aquí se crió, aquí ha vivido y aquí sigue, transmitiendo sus conocimientos a su hija, Inma, quien se encargará de seguir el cultivo de sus tierras cuando él ya no esté. La producción principal de los Camagroga es la chufa, que cultivan con paciencia, amor y sabiduría, y venden a unos pocos pero selectos clientes. Entregan, por así decirlo, “chufa de autor”; ésta es su forma de resistir el bajo costo y las grandes superficies, para evitar ser devorados por la dinámica del gran capital y la globalización, de la que Antonio es muy consciente. Camagroga filma un ciclo completo de la tierra en la huerta valenciana, y con ello el trabajo de Antonio e Inma durante un año entero. La película quiere ser una elegía del trabajo, la tierra, la herencia y la resistencia. Premios 2020: estreno mundial en Sheffield Doc / Fest 2020: Sección informativa de la 35 Mostra de València - Cinema del Mediterrani