Con motivo del 30.º aniversario del inicio de la Bienal de Gwangju, un hito importante que celebra tres décadas de excelencia artística e intercambio cultural, la 15.ª edición de la Bienal de Gwangju contará con el Pabellón de la Bienal de Gwangju más grande jamás creado. Presentará una amplia gama de obras de arte de todo el mundo, facilitadas por instituciones culturales de primer nivel, y se espera la participación de aproximadamente treinta países.
Pabellón de arte español (스페인 아트 파빌리언). Nombre de la Exposición: Woven serenity; Inner room. 휴;안방:
El valor cultural originario de España es reconocido por los ciudadanos por su patrimonio cultural de artistas de renombre y los logros notables de la arquitectura española. Así, el Pabellón de Arte Español pretende abordar la producción de un proyecto espacial multidisciplinar concreto. A través de este enfoque artístico nuestro pabellón muestra una presentación única y ecléctica, estando al mismo tiempo en consonancia con la identidad de nuestro país.
El Pabellón de Arte Español explora el espacio de recuperación en la ciudad de Gwangju en un diálogo entre el lugar expositivo, el diseño arquitectónico y su enfoque materialista. Las vivencias individuales, los recuerdos y determinados tipos de inquietudes emocionales y el público colectivo, incluso la gestión política que realizamos sobre estos, se abordan desde una perspectiva artística y conceptual. Gwangju, en particular, es una ciudad que ha sufrido especialmente en su historia reciente. Su familiaridad con el dolor y la recuperación del trauma colectivo, tras el levantamiento de Gwangju el 18 de mayo de 1980, ha inspirado esta instalación multidisciplinar en el Pabellón de Arte Español.
Esta exposición pretende trabajar la salud y el bienestar mental como concepto de investigación, pero evita la representación directa, crea un espacio relacional con los visitantes y busca que el entorno actúe como intermediario.
El objetivo de la exposición es contraatacar la “arquitectura hostil” transformando el espacio expositivo en un lugar donde el visitante, tras asistir y participar en él, conquista el poder revelador de adquirir conciencia pública. Las obras expuestas ofrecen una experiencia donde lo que se esconde al salir de casa es recibido, acunado, valorado y respetado, otorgando al visitante un nuevo estatus: un ciudadano pleno que puede y debe exigir que el mundo se adapte a sus debilidades. El proyecto jugará con el entorno como espacio de cuidados indirectos pero imprescindibles para que la persona pueda conseguir una recuperación intensificada.
El proyecto creará una especie de laboratorio o fábrica de experiencias y objetos para nuestra arquitectura urbana que acoge al individuo, poniendo a su disposición los dos factores esenciales para la curación, el TIEMPO y el ESPACIO.