La muerte es un problema para los vivos
Death is a problem for the living
La muerte es un problema para los vivos es una película finlandesa dirigida por Teemu Nikki.
Sinopsis: Para Risto y Arto, los conductores de coches fúnebres más baratos del mercado, todo ha ido mal. Risto es un jugador empedernido que, debido a su adicción, corre el riesgo de perder a su familia y su trabajo, mientras que Arto descubre que nació con un 85% menos de cerebro que la media, y esta revelación le deja una sensación de vacío. Risto ve su única salvación en la fuente misma de su destrucción, el juego, y espera una gran victoria para saldar todas sus deudas. Arto, en cambio, antes de descubrir su enfermedad llevaba una vida normal con su mujer y un trabajo como profesor en un jardín de infancia. Aunque Arto tiene poco o ningún cerebro y Risto carece de corazón, juntos su situación no es del todo desesperada. Sin trabajo y sin familia, los dos amigos duermen en el viejo coche fúnebre que utilizan para transportar a los fallecidos, con la esperanza de encontrar cada mañana una solución a su existencia. Además de transportar a los difuntos para funerales y entierros, los dos acaban aceptando trabajos no siempre del todo legales: Ulla Sonni, productora de programas para la dark web, se interesa por sus servicios y quiere utilizarlos para deshacerse de los cadáveres de los jugadores perdedores en un programa llamado “Live Rounds”, un juego de ruleta rusa retransmitido en directo por internet. Naturalmente, las cosas no salen como estaban previstas y Risto y Arto acabarán poniendo en juego sus propias vidas.