Mies van der Rohe. Un arquitecto visionario en viñetas
Mies van der Rohe, Le Corbusier, Frank Lloyd Wrigth… La Santísima Trinidad del Movimiento Moderno. Los tres sentaron las bases que definieron la arquitectura del siglo XX hasta nuestros días. Los tres construyeron, pero también se crearon a sí mismos. Ninguno de ellos estudió la carrera de Arquitectura, pero son respetados –cuando no idolatrados- por quienes valoran sus legados –hayan estudiado o no Arquitectura-.
De los tres, Mies van der Rohe encarna como nadie la voluntad férrea de construir, de ver en pie aquello que, como visionario, llegó a proyectar. Cueste lo que cueste, caiga quien caiga por el camino, aunque para ello tuviese que coquetear con regímenes totalitarios como el nazi en la Alemania de Hitler. Y que peleó por mantener una autonomía y una libertad creativa que también buscó en su vida personal, aunque ello le llevase a pelear con sus clientes o distanciarse de sus socios, de sus amigos e incluso de su familia, con una buscada soledad como peaje a pagar. Haciendo honor a su cita más célebre: menos es más.
Como sus edificios, reducidos a lo esencial, buscando el refinamiento en el detalle y huyendo de todo adorno superfluo que no pudiese otorgárselo simplemente el uso de materiales puros como la transparencia y luminosidad del vidrio, la ligereza y robustez del acero o los colores y betas de los mármoles.
El Pabellón de Alemania en la Exposición de Barcelona de 1929, la villa Tugendhat, la casa Farnsworth, el edificio Seagram, el campus del IIT o la Nueva Galería Nacional de Berlín. Una lenta pero segura trayectoria profesional que pasó por obras de juventud –de las que después renegó cuando experimentó con audaces propuestas de rascacielos y novedosos proyectos de casas nunca construidos-, hasta llegar al estilo depurado que más tarde definió su obra.
Así fue también su vida. Vida plasmada en las viñetas del cómic que aquí se exponen y que tratan de mostrar la grandiosidad de la obra de un arquitecto como Mies. Una obra como fondo de lo que supuso su recorrido vital por la primera mitad del siglo XX, en los momentos más convulsos de la Europa de entre guerras y que lo llevaron a emigrar a los Estados Unidos, sin mirar atrás. Sin arrepentirse.
La inauguración de la exposición cuenta con la presencia del ilustrador, el arquitecto Agustín Ferrer Casas y con representantes de la Editorial Graffito quienes publicaron el volumen "Mies Van der Rohe".
Agustín Ferrer Casas presentará la exposición y hablará del proceso de ilustración, así como de la importancia de Mies van der Rohe.